febrero 24, 2009

.status.


Estas son algunas cosas que recuerdo: Dejé un libro en el carro de AnaBelle. Hay gente que cree que hacer video-arte se trata de poner imágenes curiositas que se repiten y repiten y repiten. La comida ya no me esta quedando tan buena.

Creo que estoy un poco intoxicada de la ciudad. Me ha pasado 2 veces desde que vivo aquí. Siento que la reseques va mas allá de mi piel, como lo dije la comida me sabe insípida. Y comienzo a sentir un injustificado aprecio por la gente que veo de lunes a viernes en mi clase de ingles, y no es que sean desagradables, solo que estoy segura que se trata de un síntoma.

El síntoma del extranjero.... es algo mas o menos así: después de estar bien durante meses te dan ganas de recordar que se siente pertenecer a un sitio. Lo que sea que eso signifique. Es patético y natural a la vez.

Hoy tengo ganas de estar en la playa, con un emparedado de ensalada de atún. Oler a Banana Boat.


5 comentarios:

Unknown dijo...

te comprendo muy bien digamos que la rutina produce ciertas patologias del vacio yo por mi pate que te dire te mando un escrito para en donde mas o menos explico mi anhedonia y te invito a que conozcas miblog
humo-malsano.blogspot.com

todo esta dicho cuando estas desesperado
cuando platicas con patético existencialistas
mientras todos hipocritamente con los ojos desbordados
buscan la aceptacion de filosofos marginados
la misma problematica en diferentes escenarios
en círculos sociales de funcionarios
tomando coñac y hablando de política
o con intelectuales izquierdistas
de ideas enardecidas y acciones paraliticas
y que decir de los yuppis vanguardistas
y de sus frivolidades anestésicas
o de los masones cabalísticos
y sus rituales maquiavélicos de dominio mundial
alucinación clandestina de someter al caos
la misma problematica en diferentes escenarios
entre los hedonistas obsecionados que se ahogan de placer
o en los anémicos ascetas que buscan levitar
en medio del hambre el frio y la soledad
ya me canse de intentar comprender
a los adictos suicidas y a los deportistas hipocondriacos
a los jóvenes irreverentes y a los ancianos resignados
a las damitas vanidosas y a las putas ambiciosas
a los infortunados amargados y a los afortunados realizados
!!!!todo mundo es sometido por su necesidad de afiliación¡¡¡¡
creo que a mi lista de enfermedades mentales
añadiré la sociopatía
obscuro secreto de los alienados
que han dicho todo cuando están desesperados

Rogelio Baillères dijo...

A mi me sucede en mi misma ciudad en contadas ocasiones. No creo que se deba a una tendencia a la nostalgia o hacerle fiesta a sentirme despegado del rebaño, pero, podrá decirse que no, siento, es bonito dé repente sentir esa individualidad y carencia de raíz al estar tan plantado en una selva sin luz roja en el semáforo, ¿no?

Unknown dijo...

Sí... qué ironía... un día decidí publicar las pendejadas que se me ocurren, y voilá!! que mi blog se vuelve famoso!!... en fin...

Muy chida la foto de este post... saludos!!

Tatiana Capacha dijo...

jajaja, mmm no se pero el ultimo coment me dio mucha risa, mm no se creo que....como?, de donde eres tons, y que es lo que extrañas, yo te extraño...

Anónimo dijo...

algunos simplemente 'no tenemos lugar', hay q hacerse un hogar y una vida con lo q se tiene a la mano.. independientemente de los demás

es sólo cuestión de tiempo.. y no porque las cosas mejoren con el tiempo sino porque supongo uno se acostumbra a esa sensacion de 'reseques' q mencionas