hoy fue un día en el que caminé. y miré con desgano a las multitudes y sus gestos raros. los helados, monedas brillantes y inevitables números par. todo con un soso brillo, que no me producía ni alegría, ni tristeza. pensé que así sentirían los los monjes de un país lejano. vi a un hombre en un sofá, que a su vez miraba a una mujer en una silla. y ninguno sonrío. y a pesar de traer reloj nadie me pidió la hora. miré una película, no señalé nada y escribí sobre esas cosas que vemos y deseamos tocar.
1 comentario:
Publicar un comentario